2 de septiembre de 2014

Aún con todo puede que no seas nada.


No quiero bailar con el miedo por si acaso lo piso; mejor me quedo contando los minutos que me quedan para salir corriendo a pedacitos.
No te preocupes no es ningún problema, tampoco bailo con la pena;
Es sólo que es una buena estrategia, la vida nos enseña a construirnos por piezas, ya sabes 'despacito y con buena letra'.
Que la gente va y viene, que tú me tienes y me quieres, me despeinas y me tiras, me atraes o me vienes con esos cuentos que ni en la china, que dudas de todo y que no eres para nada el problema que nos arrastra.
Dime, ¿qué quieres? Las palabras nos amargan que te crees lo que quieres porque de actos no sabes nada.  Y dime qué más da, si en esta historia de dos fui yo la única que no ganó nada.
Ahora, oyeme bien lo que te advierto, el día que yo sea un todo es porque de tu rastro en mí no quedará absolutamente, NADA.

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